Hoy en Un Paseo por el arte... ¡Un sueño plácido!
Vincent Van Gogh (1853-1890)
La siesta, 1889-1890
Óleo sobre tela, 73 x 91 cm
Esta obra, realizada durante la etapa del artista transcurrida en Saint-Rémy, está inspirada en un dibujo de Jean-François Millet, por el que sentía una gran admiración. En un primer momento, tenía que tratarse de un boceto, pero finalmente, Van Gogh lo convirtió en un magnífico óleo. En él vemos a una pareja de campesinos descansando tras las duras tareas, cobijados bajo la sombra de una hacina de heno. El hombre, cuyo rostro está cubierto por un sombrero, se ha quitado los zuecos, que reposan junto a las hoces, difíciles de distinguir por ser prácticamente del mismo color que la paja. La mujer aparece recostada, apoyando ligeramente su brazo sobre el pecho del hombre.
Uno de los aspectos más interesantes de esta obra es el contraste entre los colores, en este caso entre el amarillo y el azul, los colores preferidos del artista holandés del barroco Vermeer. El amarillo está presente en todas sus gamas, desde la suave y tenue tonalidad hasta la más intensa. Lo mismo ocurre con el azul, que en la camisa del hombre posee unos tonos claros y en el cielo y en el pantalón vuelve a adquirir una gran fuerza expresiva.
Detalles:
1. En segundo término podemos apreciar un carro de tonos azules junto a un montón de paja, mientras que una vaca con manchas rojizas se dispone a comer.
2. El cielo es de un azul intenso, y el artista lo resuelve a través de la utilización de una pincelada suelta y densa.
¡Feliz fin de semana!
Cristina
Me encanta... a pesar del acto que se refleja me parece un cuadro muy vivo, tal vez por el contraste de colores.
ResponderEliminarBesos guapa!
Cómo me gusta este artista!!!!
ResponderEliminarNo conocía este cuadro, pero me ha entusiasmado y con tu explicación mucho más.
ResponderEliminarUna abraçada i bon cap de setmana, Cristineta.
Hola, mi queridísima Ms Mondrian,
ResponderEliminarCuanto tiemo sin pasar por aquí, no tengo perdón! Sobretodo teniendo en cuenta con la de cosas interesantes aque se aprenden en tu blog. Como por ejemplo, el cuadro que nos muestras hoy: no conocía LA SIESTA de Van Gogh, así que calquier descubrimiento del pintor que jamás consiguió verder un cuadro en vida, siempre merece la pena. La infinita tonalidad de marrones y beiges es simplemente maravillosa. Que envidia me da la gente que ha sido bendecida con el don del arte supremo...
http://humordemoda.blogspot.com
Precioso,me gusta Van Gogh y tu haces que sea mas admirable con tus explicaciones,petonets
ResponderEliminarTransmite mucha calma
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